04 Mar
04Mar

Soy una psicóloga que utiliza unos lentes imaginarios y un tinte de contraste morado en el cerebro (también imaginario), que le ayuda a ver y analizar las experiencias desde un enfoque crítico, anteponiendo los derechos de las mujeres, niñas y adolescentes en su práctica profesional.

Soy una mujer en constante aprendizaje y he transitado varios caminos para llegar al suelo que piso hoy como profesional (y sigo caminando). 

Soy una psic. que no te va a dar una receta de cómo vivir tu vida, ni te va a decir cuales son los 5 pasos para ser una mujer perfecta en esta sociedad que habitamos. 

Lo que sí puedo hacer es acompañarte a comprender y cuestionar que te provoca esos síntomas y ese malestar que te trae a la consulta para hacerlos visibles, palpables y luego intentar darles un espacio menos molesto en tu vida.

 Entender que no todo lo que te está pasando ocurre dentro tuyo, que no eres la única responsable y que no depende solo de ti sentirte mejor. 

Además, si quieres te puedo prestar mis lentes y mi tinte de contraste morado, aunque prefiero que tú construyas los tuyos. 

¿Una psicóloga feminista?

Puede ser, si ser feminista es… … entender que hombres y mujeres somos diferentes, pero que debemos gozar de igualdad de derechos, que somos distintos en anatomía y en funcionamiento, pero no inferiores en capacidad intelectual. …cuestionar los sesgos de género que durante años posicionaron y relegaron a las mujeres al mundo privado, obligadas a asumir roles de crianza y cuidado de otros/as y a los hombres en la vida pública haciendo cosas “importantes”. (como si criar y cuidar no fuera fundamental para existencia de la humanidad) …cuestionar la asimetría de poder que se sigue dando en las relaciones laborales, familiares, sociales, etc. entre hombres y mujeres… … valorar la historia de miles de mujeres tratando de cambiar el mundo para que todas gocemos de autonomía y de relaciones libres de violencia… Sí, todo eso para ti es ser feminista, entonces soy una psicóloga feminista.

 Con esto quiero decir que mi práctica no es neutra, que, si bien no soy un referente de nada y tengo muchísimo que seguir aprendiendo, esta es mi vereda y están todas invitadas a participar de este espacio terapéutico, seguro, libre de prejuicio y sesgos androcentristas. Amo trabajar con mujeres, con ellas he aprendido mucho, las he visto, se han visto, me he visto en ellas también.

 A través de sus relatos, creencias y anhelos hemos tratado de desenmarañar una trama muy apretada de machismo y violencia estructural pero también de amor y un sin fin de capacidades que alumbramos hacia la autonomía, libertad y bienestar.

 Pamela Deino Durán Psicóloga con enfoque género

Comentarios
* No se publicará la dirección de correo electrónico en el sitio web.